Todos somos dueños de una tierra, de un mapa único; un enorme mapa que recorreremos a pie y con el corazón. Este mapa no tiene fronteras y consta de miles de personas , para algunos de millones de personas. Todo ese territorio es solo tuyo.
En él se encuentran personas que solo te las cruzarás una vez y quizás ni os miréis a la cara. Otras personas te las cruzarás cada día sin ni siquiera conocer sus nombres. Algunas de esas personas, muy escogidas te acompañarán toda la vida, lo quieras o no. Otras estarán en tu territorio solo un tiempo para nunca más las verás. Otras estarán muy cerca de tí de forma muy intensa para después de una etapa ausentarse. Otras serán tus compañeros del alma, transparentes como el agua.
Unos romperán tu corazón en mil pedazos, otros te harán heridas leves; unos pasarán indiferentes, otros despreciables, otros te llenarán de alegría; unos llorarán contigo, otros te harán llorar; con otros sentirás la hermandad y de otros sentirás que ojalá no los hubieras conocido...y muchas opciones más. Porque ese territorio está plagado de las personas con las que contactarás durante toda tu vida y a todas debes perdonar.
Esto no es una elección , es un encargo, un gran encargo de liberación que les prometiste, que te prometiste. Ese encargo debe ser hecho al completo. No hay límite de tiempo, puedes intentarlo las veces que precises.
Tienes en contra las voces de los enajenados que intentan retrasarte en la tarea. La única tarea que viniste a hacer, pero te hacen creer que tienes cosas más importantes , mucho más importantes que hacer como: tener éxito, subir tu autoestima, ser famoso, ganar mucho dinero, ser propietario de muchas cosas, tener seguridad, aparentar felicidad, ser autosuficiente, ser orgulloso, parecer que sabes siempre lo que haces...etc.
Esas voces gritan muy fuerte y hablan mucho así que son muy llamativas pero en el silencio íntimo sabes que no hay nada en este mundo que te de completa plenitud.
El mensaje inducido socialmente es: sé libre, disfruta el momento, haz cualquier cosa que te dé placer. Ante este gran engaño, ante este espejismo inducido ¿qué libertad podemos vivir?
El discernimiento no viene sin disciplina, sin meta , sin valores, sin contención...
Siembra hermano, siembra oraciones que bendigan a tus hermanos, a la humanidad, a cada persona con la que te cruces. Siembra perdones que lleguen a todo el territorio que tu abarcas, para liberarnos de la gran ilusión de separación.
Somos hermanos, somos uno.
El mensaje inducido socialmente es: sé libre, disfruta el momento, haz cualquier cosa que te dé placer. Ante este gran engaño, ante este espejismo inducido ¿qué libertad podemos vivir?
El discernimiento no viene sin disciplina, sin meta , sin valores, sin contención...
Siembra hermano, siembra oraciones que bendigan a tus hermanos, a la humanidad, a cada persona con la que te cruces. Siembra perdones que lleguen a todo el territorio que tu abarcas, para liberarnos de la gran ilusión de separación.
Somos hermanos, somos uno.
Foto de Cassie Smart en Unplush.
Comentarios
Publicar un comentario